Son locales únicos, especiales, con un ambiente que los diferencia del resto y donde acceder a ellos se convierte, si quieres, en una aventura. Los restaurantes clandestinos pasan desapercibidos y es precisamente su exclusividad lo que los hace distintos de los formatos convencionales ya que ofrecen experiencias gastronómicas singulares, en un ambiente privado y con largas sobremesas. Éstos tienen su origen en Cuba y Argentina donde a principios del siglo XXI chefs amateurs comienzan a ofrecer cenas y comidas en sus casas. En Europa, el boom por este tipo de iniciativas tiene su origen en el año 2009 en Londres, ciudad que se caracteriza por recoger las últimas tendencias en materia de ocio.
Atrévete con Inboga a recorrer los restaurantes clandestinos en Valencia.
Joaquín Schimidt (C/Visitación, 7)
Un aparcamiento subterráneo da entrada a una de las propuestas gastronómicas más personales de Valencia. Joaquín Schimidt propone en su restaurante un trato personal, original y una comida creativa que guarda en secreto siempre para sorprender a sus invitados. Él mismo es el que compra, cocina y hace las veces de camarero para sus no más de 30 comensales. Los vinilos y los cuadros de Joan Verdú y de Julio Antonio colgados en las paredes, completan un ambiente muy peculiar de donde sin duda saldrás con un buen sabor de boca.
Clandestine Dinner
En Clandestine Dinner todo es un enigma. Hasta el mismo momento de empezar la velada no sabrás dónde cenarás ni qué. Simplemente tienes que hacer la reserva a través de su web y días antes te informarán del punto al qué debes acudir (siempre lugares concretos). Allí te encontrarás con tus compañeros de velada y dará comienzo la experiencia. Sin duda, una buena opción para conocer gente nueva y disfrutar de un ambiente diferente.
Inkubo (Plaza Marqués de Busiano, 2)
El estudio de Luis Millet en el Barrio del Carmen es un perfecto ejemplo de restaurante clandestino. De día, galería de arte donde trabaja, crea, expone y vende sus obras. De noche, un espacio donde celebra cenas que él mismo cocina tanto para conocidos como desconocidos. Su arte lo lleva a la cocina para crear platos que no dejan indiferentes a sus invitados. También se puede reservar para celebrar eventos privados.
Enigmatium (www.enigmatium.com)
Enigmatium es el único restaurante espectáculo en Valencia del que se habla pero nadie sabe dónde está. Cuando llamas para realizar una reserva, no se facilita el lugar. Días antes de la velada, envían pistas y acertijos con los que averiguar dónde encontrarlos. Éste es sólo el primer enigma de los muchos que acontecen el día de la cena. Gastronomía, humor, magia y actuaciones ofrece esta empresa tan peculiar.
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